Con la primera ceremonia presencial de apertura desde la del 2019, se inició oficialmente el año académico 2022 en Campus Lima. En el evento, 37 profesionales de distintas carreras obtuvieron el grado de magísteres.
Por Gabriela Hernández. 06 mayo, 2022.
Presidieron el acto académico el Vice Gran Canciller, doctor Ángel Gómez Hortigüela Amillo, acompañado de los doctores Antonio Abruña (rector), Susana Vegas (vicerrectora académica), Marcos Agurto (vicerrector de investigación), César Calvo (vicerrector de Campus Lima); y de los magísteres Patricia Soto (directora de estudios) y William Zapata (secretario general).
Treinta y siete profesionales de los distintos programas de maestría de la UDEP tuvieron un acto especial de graduación, pues, por primera vez, de manera extraordinaria y atendiendo a las medidas sanitarias, el Consejo Superior delegó a sus familiares el cambio de lado de la borla del birrete, que simboliza su nueva condición de magísteres. Los invitados designados los acompañaron al estrado y saludaron, con una venia, a las autoridades.
Al referirse a esta celebración, el rector, doctor Antonio Abruña, expresó la alegría de todos por el retorno a la presencialidad: “la nuestra es una universidad presencial” dijo, y “queremos enriquecer la presencialidad que siempre nos ha caracterizado con las posibilidades de la educación a distancia”, como con la participación de profesores nacionales e internacionales en las aulas virtuales.
A la ceremonia también asistieron los miembros del Consejo Académico de la UDEP: Héctor Viera, María Luisa Murillo, María Irene Velaochaga y Andrés Crosby, los distinguidos con la Clase Magistral de Investigación UDEP 2021, los doctores Gabriel Natividad y Luis Castillo; y el claustro académico.
Lección inaugural
En la Ceremonia de Apertura, el doctor Luis Castillo dio la lección inaugural “El bien común y la libertad de expresión”. Explicó como “el bien individual se conecta con el bien de la comunidad, algo necesario, al punto de que la medida de realización de cada persona dependerá también de la medida de realización del bien común”, dijo.
Destacó que la responsabilidad de la existencia de un bien común robusto recae, en los gobernantes. Sin embargo, aclaró, “no es posible la gestión del bien común sin la contribución de la ciudadanía”. Las personas, en su vida diaria, están llamadas a contribuir en las múltiples comunidades de las que forman parte, acotó.
Al referirse a la libertad de expresión, el doctor Castillo resaltó que “está llamada a generar luces. Por eso es una de las libertades que más atacan quienes están interesados en que la sociedad desenvuelva su desarrollo a tientas”.
La lección concluyó con la reflexión acerca de la necesidad de comprender a la persona completamente, en sus dimensiones individual y social, para recordar que “ella vale siempre como fin, nunca como medio u objeto”.
Misa del Espíritu Santo
Previamente, a las 12:00 m., el capellán de Campus Lima, padre Juan Armas, celebró la Misa del Espíritu Santo para dar gracias a Dios por el nuevo año académico de la universidad. En la homilía, animó a todos a “trabajar guiados por el amor, por el Espíritu Santo” para acertar en la toma de decisiones ya que, cuando se hacen las cosas por amor, aunque signifiquen complicarse, se es más eficaz, dijo.
Recordó el mensaje de san Josemaría Escrivá: “un trabajo movido por el amor de Dios, es un trabajo que santifica, que sabe captar los matices, la diversidad de la vida, descubre la belleza, y no se queda solo con los defectos; es humilde, no pretende dominar la realidad, se abre a lo novedoso, a lo distinto, y sabe acoger”.
